A 5 kilómetros del centro de la ciudad de Peso da Régua en el Distrito portugués de Vila Real, por la N108 llegarás a Caldas de Moledo famosa localidad por sus aguas termales.
Dudaba si acercarme hasta aquí al hacer la planificación del viaje por Portugal, ya que el tiempo siempre es limitado y había leído en varios sitios que estaba todo en ruinas, aunque con un proyecto de rehabilitación por parte del Ayuntamiento y me exponía a encontrar todo en obras 🚧
Pero os diré, que para nada me arrepiento. El sitio es impresionante aunque de un poco de penita ver todo en estado de abandono con toda la riqueza y movimiento que tuvo que tener ésto en otra época.
Antes de entrar en el recinto del Parque Termal, ya veremos diferentes edificios a ambos lados de la carretera propios de una villa termal de principios del siglo XIX. Ahora en estado de semi ruina, pero la verdad es que son impresionantes 😱
En la puerta de entrada al Parque Termal se puede ver el nombre de Antonia Adelaide Ferreira y la fecha de 1895, pero la historia de este lugar se remonta mucho más atrás, al siglo XII cuando Teresa de Leão, madre del primer rey de Portugal D. Afonso Henriques, puso una barca para cruzar el río de forma gratuita y creó una casa de huéspedes para que las personas más desfavorecidas pudieran tener acceso al baño en estas aguas que ya eran conocidas por sus propiedades terapéuticas.
Hay un letrero que indica un horario de apertura de 8 a 16:30 de lunes a viernes y festivos de 9 a 20 horas, pero por el estado del suelo y de la puerta no se bien si se cerrará durante la noche.
Descendemos por la carretera y nos vamos encontrando con sitios realmente bonitos a orillas del río Duero que en esta zona hace de límite entre los distritos de Vila Real y Viseu.
Fíjate en todas las laderas con terrazas para viñedos y grandes casonas o Quintas que son bodegas, ya que estamos en la Región del Alto Douro Vinhateiro destacada por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad en 2001.
Una zona vallada con obras sin terminar, sería parte del proyecto de remodelación del lugar. Las obras deben estar paradas desde hace tiempo por el mal estado del edificio nuevo.
Más abajo hay otra hilera de apartamentos más antiguos pero que también están en estado de abandono aunque vimos algunos de ellos que estaba gente viviendo, no se si legalmente o por ocupación.
Al final de esta hilera de casas hay una construcción de madera que parece moderna y debe ser utilizada en verano, porque se ve con uso. Claro, ventajas y desventajas de viajar en invierno 🍁
El paseo finaliza en una rotonda con una fuente ornamental que también conoció mejores momentos, y una pista hacia la parte alta y carretera general.
Continuando con la historia de este sitio tan pintoresco, os diré que sería en el siglo XVIII cuando estas aguas alcanzan mayor fama que se vio culminada años después con la empresaria del vino de Oporto, Antónia Ferreira y su marido Francisco José Silva Torres, quienes compran las aguas y la finca para construir el Parque Termal compuesto por el Palacio Ferreirinha, amplían la hospedería transformándola en el Gran Hotel, amplios jardines, muelle, capilla privada, casas de baño, farmacia y restaurantes.
Con la fama que alcanzó el lugar y la cantidad de visitantes que recibían, se fueron ampliando los servicios llegando a contar con 3 hoteles: Gran Hotel, el Hotel Vilhena y el Petit Hotel, 3 capillas, farmacia, carnicería, varios comercios, telégrafo-postal y la estación de ferrocarril para mejorar el acceso.
Sin duda todo un idílico sitio para descubrir con calma y que os invito a que visitéis 🙂
📍Os dejo ubicación para situaros mejor:
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