En la parroquia de San Martín de Meirás, Sada (A Coruña) se sitúa el Pazo de Meirás declarado Bien de Interés Cultural en el año 2008 y
tristemente conocido por las polémicas con la familia Franco que fueron sus últimos inquilinos hasta su adquisición por parte del Estado pasando a ser patrimonio público.Pero más allá de la "polémica adquisición" por parte de esta familia, ya era conocido por las Torres de Meirás o Granja de Meirás, como le llamaba la escritora Emilia Pardo Bazán que residía aquí varios meses al año y donde escribió algunas de sus obras como Los Pazos de Ulloa desde la Torre de la Quimera donde tenía su biblioteca.
Desde el pasado verano de 2021 se puede realizar visita guiada a la finca con personal del Ayuntamiento de Sada, en grupos de máximo 20 personas con reserva previa.
Toda la finca está delimitada por un gran muro de piedra, contando con 3 puertas de acceso. Ahora solo se utiliza una de ellas y es donde realizamos la primera parada.
Este gran portalón de hierro procede del Alcázar de Toledo y en el aún se pueden ver muescas de balas.
La gran mayoría de los caminos que nos encontraremos por la finca están realizados con piedras blancas pequeñas entre el cemento. Pues bien, estas piedras fueron sacadas de la cercana playa de Sada que quedó seriamente dañada y hubo que recuperarla tras las obras del pazo 😱
Y es este camino entre un espeso bosque con gran variedad de árboles como algunos eucaliptos centenarios, por el que llegamos al "paziño" que nada más y nada menos fue construido como casita de juegos para la hija de Franco 😏 Carmencita.
Se trata de la recreación en pequeñito de un hórreo, un pozo y una casita con cocina y grifo con agua procedente del pozo. Ahí queda eso! 🤦♀️ en una época en la que muchas familias no tenían ni agua corriente en casa.
Una amplia pradera con varias fuentes ornamentales, mesas de piedra y más árboles de varias especies, muchos de ellos exóticos.
La parte sur del edificio es la fachada principal que recuerda a un castillo medieval flanqueada con 2 torres cuadradas almenadas, siendo la más esbelta la conocida como Torre de la Quimera con el "balcón de las musas" que tanto inspiró a Emilia Pardo Bazán. Tiene detalles arquitectónicamente hablando, espectaculares como ménsulas, columnas, balaustrada, cordones, además de varios escudos familiares, algunos pertenecientes al linaje de los Pardo Bazán y otros puestos en la etapa de Franco.
En todo el recorrido podemos ver piezas de gran valor como blasones, escudos, estatuas, fuentes, cruceros...
Ahora entramos en el interior del pazo por la puerta principal, siendo lo único que se puede exponer al público (de momento) es el hall, la escalinata de acceso a la parte superior y una pequeña sala a mano derecha.
Algunas cosas son de la construcción original de Pardo Bazán como la escalinata y las estatuas-lámpara, lógicamente el gran busto que preside el rellano... no hace falta explicar que es posterior 🤭
Sala a mano derecha con algunos muebles y tapizados escogidos por Emilia.
y múltiples signos de ostentación del dictador, como decenas de cabezas de ciervo y otras piezas de caza, maquetas de barcos, mosquetones... y en la parte izquierda sería la entrada al despacho de Franco donde se celebraron varios consejos de ministros y audiencias.
El pazo era la residencia oficial de Franco durante los meses de verano, llevando un gran séquito con él para su escolta con personal del ejército y Guardia Civil. Aquí fue, por ejemplo, donde se decidió sobre el Proceso de Burgos de 1970 en el que se condenan a 16 miembros de la organización armada ETA.
En el año 1978 se produjo un "sospechoso incendio" en el ala derecha del pazo (al mismo tiempo que en otras de sus propiedades) y como consecuencia de ello muchos objetos de valor quedaron destruidos, como el suelo de madera original que fue sustituido por el actual.
Ahora le toca el turno a la parte oeste del edificio donde se encuentra la capilla original de la finca flanqueada por dos torres.
En su interior se puede ver un retablo barroco dedicado a San Francisco y que fue trasladado desde el pazo de Santa María de Sada, al sufrir éste un incendio; varios cuadros de valor, las sillas originales bordadas por la madre de Emilia Pardo Bazán que ocupaban su escritorio y fueron trasladadas hasta aquí por expreso deseo de Carmen Polo,
En esta capilla se casó la escritora en 1868 y también su hija Blanca en 1910.
La gran balaustrada de piedra que rodea toda esta parte de la finca, así como la escalinata, las gárgolas que adornas las torres y a saber cuantas cosas más, proceden del Pazo de Dodro también conocido como Pazo del Marqués de Bendaña que fue desmantelado y "donadas sus pertenencias" para adornar el Pazo de Meirás. El ayuntamiento de esta localidad tiene litigio abierto reclamando estas propiedades.
Esta es una de las 2 pilas medievales también con polémica (la otra está unos metros más adelante como macetero) de la Iglesia de San Xulián de Moraime que fueron traídas hasta aquí de forma irregular. Al parecer le gustaron a Carmen Polo 🤷♀️
En el momento de su entrega al Estado estaba en estado ruinoso ya que fue utilizada como almacén durante años sin prestarle la más mínima atención.
La finca pasó por manos de varias familias como los Dejo, Taibo, Ribadeneyra y Patiño de Bergondo desde el siglo XVI, hasta que fue llegó a manos del abuelo de la escritora Emlia Pardo Bazán, Miguel Pardo Bazán de Mendoza Castro.
Será en 1809 durante la Guerra de la Independencia cuando, como represalia, la propiedad fue incendiada por las tropas francesas. Como consecuencia se vio obligado a reconstruirla y la hizo llamar "Granja de Meirás".
En 1894 se comienza a construir el edificio de las torres por deseo y bajo diseño de la novelista y su madre que incluso se encargarían de su decoración, con vidrieras con títulos de sus obras, sillas bordadas con caras de pensadores de la antigüedad...
Tras la muerte de Emilia en 1921, y el asesinato de su hijo Jaime y su nieto en 1936, la propiedad queda en manos de sus herederos quienes deciden donarlo a la Compañía de Jesús con una serie de condiciones que, al no ser aceptadas por la orden, nunca llegarían a ocuparlo.
Tras la Guerra Civil Española, en 1938 se constituye la "Junta Pro Pazo del Caudillo" formada por varias autoridades del momento de A Coruña, con el fin de conseguir la propiedad y donarla al Jefe del Estado como residencia de verano de su familia.
Como una de las muchas "incidencias" que tuvo esta adquisición, indicar que a los herederos de Emilia Pardo Bazán no se les permitió entrar a recuperar sus pertenencias y enseres, entre ellos muchos libros que tenía la escritora en su biblioteca particular.
Las edificaciones y la finca fueron remodeladas y acondicionadas siguiendo los gustos de Franco y de su esposa. Para ello se recaudó dinero del pueblo en forma de "donativos" y a través de "expropiaciones forzosas" se hicieron con varias fincas aledañas para ampliar la propiedad.
De todo esto y de la batalla judicial posterior, y todavía pendiente a día de hoy, hay documentación escrita suficiente como para que cada uno juzgue por sí mismo, ya que mi intención no es entrar en polémica, por supuesto.
Por sentencia judicial a finales del año 2020, se declara nula la donación y pasa a ser Patrimonio del Estado.
Como os he comentado anteriormente, el pazo fue declarado BIC en el año 2008, lo que significa que sus propietarios tienen la obligación de abrir al público al menos 4 días al mes. También se tuvo que acudir a la justicia para que los herederos de Franco cumpliesen con esta obligación, y sería en el año 2011 su primera apertura de puertas al público.
En todo el largo camino para el esclarecimiento de la verdad y del proceso judicial, un papel fundamental lo tienen Manuel Pérez y Carlos Babío, hijo y nieto de los propietarios de la casa situada en la parte baja de la finca "Casa Portela-Babío" o casa de Xosefa Portela expropiada forzosamente y que se puede ver en la foto anterior, aportando documentación de gran valor.
A esta parte baja también se accede durante la visita guiada, pero en esta ocasión nos hemos quedado sin verla de cerca ya que había llovido bastante y el terreno no estaba en condiciones.
Y termina la visita en el edificio principal después de 2 horas super entretenidas en las que cada uno absorbía toda la información que podía y hacíamos fotos como locos, ya que "sabe Dios si podremos volver a entrar aquí" como decían algunos del grupo de visitantes 😏
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