Verín, ciudad del agua

En la zona sur de la provincia de Ourense y bañada por el río Támega, está la ciudad de Verín, famosa por su "Entroido" o carnaval con la figura del Cigarrón como protagonista, por poseer la acrópolis mayor de Galicia -Castillo de Monterrei-

o sus vinos con denominación de origen. Pero también es conocida por sus manantiales de aguas mineromedicinales y sus balnearios como el de Cabreiroá, Sousas, Fontenova, Caldeliñas y Fonte do Sapo.

Con motivo de su promoción turística se crea la Eurociudad Chaves-Verín, la Eurociudad del Agua con una ruta termal y del agua que tiene como objetivo dar a conocer el importante patrimonio balneario de Verín junto con el de Chaves y Vidago.

Comenzamos ✍️

Balneario de Cabreiroá

Fue el último de los manantiales en explotarse pero el que mayor patrimonio edificado conserva además de unos amplios jardines a su alrededor.

Comenzamos la visita en el parking de agüistas, donde ya vemos un cartel con el plano del lugar para conocer sus rincones.

Lo primero que veremos será el edificio del antiguo hotel balneario de 1903 en espera de algún proyecto de rehabilitación, con una gran escalinata.

Durante la Guerra Civil Española fue hospital y cuartel militar, retomando su actividad original después hasta su cierre definitivo en 1961.

Avanzando por los jardines vemos el Templete de los agüistas de 1907. Un pabellón que mantiene su estructura octogonal con marquesina original. 

En su interior, la sala central alberga la fuente con una bonita decoración con azulejos y mármol.

Seguimos caminando por el Paseo de las ardillas y el bosque de los piñones 

Para regresar por el Bosque de los Abedules de nuevo al pabellón central del hotel

Las primeras noticias sobre este manantial se refieren a un estanque al que acudían los habitantes para curar ciertas enfermedades. Sus aguas fueron declaradas de utilidad pública en 1906, cuando Sousas y Caldeliñas ya atraían a Verín a turistas de toda España.

Pero en 1908, gracias a la iniciativa de José García Barbón, indiano retornado tras haber hecho fortuna en Cuba, ya contaba con un hotel balneario único en Verín, lo que aumentó su clientela y prestigio. 

Se abrió entonces una nueva carretera desde el centro urbano para llegar hasta aquí con una línea de transporte regular, primero con un tranvía tirado por animales y luego con un servicio de automóviles.

El acceso a los jardines es libre en horario de 9:00 a 20:30 horas.

El agua mana a 17ºC siendo de mineralización débil, bicarbonatadas, sódicas, litínicas y acídulas; estando indicadas para afecciones de las vías urinarias como cólicos nefríticos, cálculos, nefritis y pielonefritis, cistitis e infecciones urinarias; trastornos gastro-hepáticos y biliares (dispepsias, gastritis, cólicos hepáticos, alteración de la vesícula, cálculos o ictericias) y trastornos metabólicos (hiperuricemia y diabetes).

Hoy en día es una de las aguas embotelladas con más presencia en el mercado español, cuya planta de embotellado podemos ver al final de los jardines.

Sousas

Desde finales del siglo XIX las aguas de Sousas junto con las de Caldeliñas, marcan el nacimiento de Verín como ciudad termal.

Éstas fueron las primeras aguas de Verín que se envasaron para la venta, siendo unas de las más antiguas de Galicia.

Al lado vemos el pabellón de planta poligonal donde está la fuente, aunque no es su estructura original, ya que inicialmente era metálica con una galería de 70 metros, muy al gusto de la época.

Este manantial fue declarado de utilidad pública en 1859.

En el interior se puede ver el manantial protegido con una caja de cristal que conserva sus cualidades y con un grifo lateral para poder recogerla.

Sus aguas eran embotelladas y vendidas por Fernando Debas et Dujant bajo la marca "Aguas de Verín", que distribuía por toda España mientras promocionaba el Balneario de Caldeliñas, del que también era propietario. Primero se vendía en farmacias como medicamento, pero en poco tiempo se convirtió en el agua de mesa que hoy nos podemos encontrar en el mercado. 

Su acceso también es público y gratuito de 9:00 a 20:30 horas.

Las aguas manan a una temperatura de 18ºC a 20º C. Son de mineralización débil: bicarbonatadas sódicas, litínicas y ligeramente fluoradas; indicadas para problemas de riñón, hiperclorhidria, gastralgia, úlcera gástrica, enteritis crónica, ictericia hepatógina, cálculos incipientes y prostatitis crónica.

Balneario de Caldeliñas

Las instalaciones del antiguo balneario de Caldeliñas fueron rehabilitadas y acondicionadas en el año 2017 para ser abiertas al público después de su cierre definitivo en 1960.

En su interior, además de una fuente manantial, se conservan algunas de las bañeras originales en donde se tomaban los baños de agua y lodo.

Se han colocado varios paneles informativos donde podemos conocer la historia del lugar.

La primera referencia escrita de estas aguas se encuentra en el Archivo de Simancas, data del siglo XVI y es un documento de compensación por 737 maravedíes al Cabildo de Ourense por sus rentas. También aparece descrito en el Catastro del Marqués de la Ensenada en 1753.

A finales del siglo XIX gracias al fotógrafo de la corte de Alfonso XII, Fernando Debas et Dujant cuando alcanza su esplendor.

Su alta posición le permitió invertir en el balneario de Caldeliñas y en el manantial de Sousas, que adquirió en 1887, publicitando sus propiedades medicinales entre los médicos de Madrid, bajo el lema de "mejores que las de Vichy".

En un pabellón más reducido situado a unos metros del principal, estaban situadas las estancias para los baños públicos.

El agua mana a 25º C, son de mineralización media: bicarbonatadas sódicas, litínicas y fluoradas, acompañadas de burbujas. Indicadas para dolencias de piel y problemas reumáticos.

Fontenova

Cerca del manantial de Sousas estaba la conocida como Fonte do Espido que fue la siguiente en declararse de utilidad pública en 1904, y por ello se la conocía como Fuente Nueva o Fontenova. 

En el momento de nuestra visita las instalaciones permanecían cerradas, pudiendo solo acceder a una fuente en su entrada principal.

El edificio principal de 1935 es donde se encuentra la fuente manantial, era antiguamente el centro médico que estaba especializado en trastornos digestivos, urinarios y reumáticos.

El edificio contaba con varias habitaciones con duchas de agua fría y caliente, ducha escocesa y baños de asiento.

Fontenova fue una de las aguas más populares de España en la década de 1960 siendo su propietario José Ribas Barreras hasta su cierre en 1962. 

La planta de embotellado situada en la parte de atrás de este edificio, estuvo muchos años a cargo del empresario portugués José de Sousa que también era propietario del manantial de Requeixo del que luego os hablaré.

En 2014 se ponen a la venta las instalaciones; en el 2018 se firma un convenio con el ayuntamiento para la cesión de los terrenos aledaños para la construcción de un parque público y el aprovechamiento del pabellón de la fuente. 

A finales del 2020, según nota de prensa, una multinacional australiana compra la planta embotelladora y demás instalaciones para crear una empresa de extracción de litio de sus aguas. 

Fonte do Sapo

A dos kilómetros del centro de la villa por la carretera de Castilla y en plena naturaleza, se encuentra este manantial a modo de fuente rústica, donde el agua nace entre las rocas.

Fue desde siempre punto de reunión de los vecinos que se acercan dando un paseo o en bici, aunque también se puede llegar directamente en coche.

Dicen que si vienes a beber de esta fuente a finales de Octubre durante 10 días, no te resfrías en todo el invierno 🤭

Es la única del municipio que nunca fue comercializada pero posee características similares al resto de ellas, añadiendo también sus propiedades para la piel.

Al lado pasa un pequeño regato con algunas zonas acondicionadas para el paseo.

Balneario de Requeixo 

En la parroquia de Villaza en Monterrei se pueden ver los restos del último de los balnearios que vamos a recoger en este post, a orillas del río Porto do Rei Búbal.

Bajo la dirección del empresario Jacinto Becerra Romero este manantial adquiere utilidad pública en el año 1900. Cuando éste fallece 7 años más tarde, sus herederos realizan obras para nuevas instalaciones tanto para la planta de embotellado como para el pabellón de bebida y hotel en el que se acogería a los agüistas en cómodas habitaciones.

Según el periódico La Región, en 1903 estaban alojados en el hotel-balneario 107 agüistas.

Sus aguas emergen a 22 grados con gas carbónico natural.

Su cierre se produce en 1961.

Al lado del edificio del balneario estaba situada la planta embotelladora de "Aguas de Villaza" de la que solamente queda el esqueleto al igual que ocurre en el hotel.

En mi visita (Junio 2022) se estaban realizando obras en el edificio del hotel tras muchos años de abandono de la zona. 

Todavía se conserva una fuente con agua minero-medicinal y escaleras de piedra de acceso al río desde el paseo.

A escasos metros río arriba podemos ver las ruinas de un molino de dos muelas, del que también existe un proyecto de rehabilitación para formar parte de la ruta de senderismo "Ruta dos Muiños del río Búbal"

Es una construcción a dos alturas suponiendo por su disposición, que una sería dedicada a la molienda y la otra a vivienda.

Al otro lado del río hay una minicentral con un pasadizo para salvar las aguas, desde donde también se puede acceder hasta el balneario.

Todo el entorno es espectacular y con mucho potencial, que espero que ese proyecto de recuperación sepa sacarle partido.

Para acceder a las instalaciones hay carretera asfaltada desde el pueblo de Vilaza, siguiendo unos metros más por pista de tierra paralelos siempre al río Búbal.

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Puedes aprovechar para visitar el casco urbano de Verín: 

- Casa dos Acevedo en la plaza García Barbón. En ella tuvo lugar un encuentro entre el Cardenal Cisneros y el rey Felipe el Hermoso. Es una casa de piedra con pórtico y tres arcos de medio punto sobre los cuales se ve el escudo familiar.

- Iglesia de Santa María La Mayor del siglo XVI. En ella se encuentran imágenes interesantes como un Cristo yacente con brazos articulados o el Cristo de las Batallas del escultor Gregorio Hernández.

- Playa fluvial del río Támega 

- Casa del Escudo o Casa del Asistente de 1737 declarada patrimonio artístico. Hoy albergue de peregrinos.

- Capilla y cruceiro de San Lázaro a pie del Camino Real 

- Convento de la Merced con claustro, torre e iglesia de estilo barroco.

- Estatua del Cigarrón obra de Xosé Lois Carreira, personaje central del Entroido verinense

- Castillo de Monterrei y Parador Nacional

* Localización: