En el concello de Carballo se encuentra uno de los arenales más largos de toda Galicia, hoy os hablaré de la Playa de Razo que se extiende hasta la de Baldaio con el importante espacio protegido que forma la Laguna de Baldaio.
Se trata de un arenal de unos 800 metros desde el puerto de Razo que continúa hasta los casi 5 kilómetros uniendo la Playa de Baldaio y Pedra do Sal. A mar abierto hacia el Atlántico, cuenta con bandera azul, y por sus abundantes olas y viento es uno de los rincones preferidos para los amantes del surf y el parapente.
En ella hay varias escuelas de surf, incluso una es pionera en España en la organización de surf camps.
Pero además se trata de una playa fósil. En el acantilado que la delimita podemos ver cúmulos de piedras y arena de lo que fue otra playa hace millones de años, cuando el nivel del mar estaba por encima del actual, allá por el cuaternario.
Se puede realizar la ruta "Senda do Mar" desde el puerto de Razo siguiendo la costa con tramos de pasarelas de madera.
Ah! y no te olvides de las vistas a las Islas Sisargas que puedes disfrutar desde aquí.
Lagoa de Baldaio
En la parroquia de Lema podemos ver uno de los humedales más importantes de Galicia y zona de especial protección ambiental, de hecho fue reconocido por la Unión Europea como Zona de Especial Protección para las Aves y Zona de Especial Protección de los Valores Naturales.
La laguna está formada por varios pequeños ríos que desembocan en ella como el Rego de Pibidal, el de San Miguel o el Senra.
Protegida por una lengua de arena, las aguas dulces y saladas se mezclan creando una marisma fértil y una laguna protegida por las dunas en la que habitan multitud de aves protegidas, a las que se puede observar desde el Punto ornitológico.
Durante muchos años, este terreno fue explotado por varias empresas para la extracción de arena, lo que provocó la variación de corrientes, y que en ocasiones se cierre el canal que comunica la laguna con el mar. También se vio afectada por la construcción de pasarelas y puentes peatonales, lo que hace que en ocasiones el agua llegue hasta casi la puerta del camping y a una urbanización cercana.
Mirador de Santa Irene do Castrillón
Para disfrutar de una de las mejores vistas a todo este espacio, merece la pena subir hasta el mirador de Santa Irene también conocido como Mirador de Castrillón por ser ese el lugar donde se encuentra.
Tras subir una cuesta en zig zag entre las casas del pueblo disfrutando de su arquitectura popular
llegamos a una amplia explanada en la que se encuentra la Capilla de Santa Irene, en una zona lo suficientemente elevada como para divisar buena parte de la costa de Carballo con la laguna y las dunas de Baldaio.
La pequeña capilla de planta rectangular, la cual tiene un añadido en su muro sur correspondiente a la sacristía, está levantada sobre un antiguo castro, que le da el nombre actual al lugar, Castrillón.
Se dice que las piedras para su construcción fueron traídas una a una desde el fondo de la laguna. Lo cierto es que su emplazamiento original era en las marismas al lado de la laguna, habiendo referencias escritas de que en 1594 aún estaba en esa zona.
La campana que luce su espadaña perteneció a un barco naufragado en la ría de Arousa, el "Aries" donada por un vecino.
Sobre el 5 de agosto aquí se celebra una gran fiesta gastronómica a base de mejillones con gran afluencia de público y que está luchando para ser declarada de Interés Turístico.
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