De Trasmañó al cielo


Estamos en Trasmañó, parroquia de Redondela, vamos a conocer el núcleo urbano de San Vicente y aunque ya estamos a bastante altura, aún vamos a subir más hasta el Monte Penide descubriendo sorprendentes vistas a la Ría de Vigo desde sus miradores, e incluso visitar el banco más famoso de Redondela en Coto Fenteira.
Empezamos el recorrido por las estrechas calles de San Vicente de Trasmañó con una mañana soleada donde parece que el tiempo se ha detenido, sus gentes pasean sin prisa y toman el sol con vistas a una Ría de Vigo que se muestra plácida y tranquila.


y sin perdernos detalle entre huertas y frutales, llegamos a un edificio modernista de ladrillo rojo, se trata del Monasterio de Trasmañó o Monasterio de las Benedictinas donde unas docena de religiosas de clausura se dedican entre rezos y cantos, para su sustento a la fabricación de pastas caseras y al alojamiento en sus 16 habitaciones para personas que busquen un espacio para el retiro y el silencio.


Ellas solas se encargan del mantenimiento del monasterio teniendo cada una su labor definida.
El antiguo Priorato de Trasmañó perteneciente a la orden del Císter controlaba las posesiones del Monasterio de Armenteira en el sur de la Ría de Vigo. Tras su abandono por la desamortización de Mendizábal, se ha construido en 1984 sobre sus ruinas, el Monasterio de las Benedictinas que podemos ver en la actualidad, del que solo se conserva la iglesia original.

Las monjas benedictinas se trasladaron desde el Convento de San Benito de A Guarda tras ser vendido para convertirlo en Hotel de 2 estrellas, en el que permanecían desde 1881.
El Monasterio de la Transfiguración del Señor, nombre con el que también se le conoce, fue fundado en 1561 por 4 hermanos del Señorío de Teáns (Salvaterra de Miño), biznietos de Pedro Madruga.


Al lado del monasterio está la Iglesia de San Vicente con el cementerio católico y antiguo cementerio protestante, con unas buenas vistas también desde el atrio.


Data de 1765 que es la fecha que reza en su fachada.
Acababa de celebrarse la Fiesta anual gastronómica del Cocido y aún quedaban restos de luces y carpa para el evento al lado de la pequeña iglesia barroca.

Ahora nos disponemos a subir hacia el Mirador do Campo da Rata y para ello cogemos el camiño da Igrexa Vella que parte en frente del monasterio, y justo cuando empieza a descender, cogemos la desviación a la derecha. Por aquí vemos alguna señalización que nos indica el camino de Santiago, y es que el camino portugués original, pasaba por el centro de San Vicente, pero las autoridades han decidido cambiar el recorrido y desviar a los peregrinos por la Senda del Agua creada a finales de los años setenta siguiendo la canalización del agua procedente del embalse de Eiras hasta la ciudad de Vigo.
Los miembros de la Asociación de Monte Mirallo y la Comunidad de Montes criticaron en su día esta actuación por "falta de rigor histórico", según se recoge en prensa local del año 2017.


Estamos ya en Monte Penide que fue ocupado por nuestros antepasados desde la antigüedad, de hecho hay bastantes hallazgos del paleolítico y neolítico como pueden ser las más de 40 mámoas que nos podemos encontrar de la tradición megalítica de enterrar a los difuntos en mausoleos bajo un túmulo de tierra, y numerosos signos de arte rupestre -petroglifos.

Consejo personal! No os olvidéis de ver hacia atrás de vez en cuando porque las vistas desde aquí arriba no se pueden perder.


Pero tranquilos que nos queda lo mejor, llegamos a la explanada del Campo da Rata que hace funciones de amplio aparcamiento para visitar el famoso banco de Redondela instalado en el año 2015 y que ha sufrido varios ataques vandálicos, el último en el año 2018, siendo quemado la mitad.
En el reza la inscripción de "Galiza it´s different" que se ha hecho tan popular con la imagen del puente de Rande y las Islas Cíes al fondo.



Está situado en Coto Fenteira y para llegar hasta él deberemos ascender por un camino empinado que encontraremos a la izquierda, no está señalizado y en ocasiones se hace complicado saltar entre las peñas para acceder. Pero sin duda, eso no es motivo para que siempre se encuentre con bastante afluencia de público.

Estamos en la mitad de nuestro recorrido - 2,60 kilómetros - y es un buen sitio para sentarse, tomar aire fresco, disfrutar de las vistas y relajarse, antes de descender.

Ensenada de San Simón desde Monte Penide
Ensenada de San Simón desde Monte Penide

Al descender y llegar de nuevo a la llanura, tomamos el camino de la izquierda, justo por el que hemos venido, pero hacia delante y comenzamos a bajar  por un camino de tierra y piedras un poco peor que los que nos hemos encontrado hasta ahora. La lluvia hace estragos en estas pendientes.

Atravesamos la Senda del Agua que aquí coincide también con el camino de Santiago y nos volvemos a encontrar con el camino de la Igrexa Vella que seguimos hasta ir a parar al barrio de Cabanas para regresar a casa.
Total del recorrido 4,15 kilómetros.

Mapa con los puntos más importantes:


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