Aunque ya para casi nadie son desconocidas las Termas de Ourense, os vamos a contar nuestro recorrido a lo largo del río Miño por una senda totalmente acondicionada que nos invita a hacer descansos en cada una de ellas para conocerlas mejor.
Partiendo del Puente del Milenio, ya cogemos el paseo a orillas del río y las primeras que nos encontramos son las de A Chavasqueira.
Estas pozas fueron las primeras en acondicionarse para uso público y por ello son las más conocidas. Tenemos dos zonas diferenciadas, las de uso público, al lado del río, y las de pago al otro lado del camino en un recinto cerrado.
El entorno está super cuidado con zona de césped para tomar el sol o descansar y además tomarse un bañito en sus calientes aguas de noche es todo un lujo. Su acceso es libre a cualquier hora del día o noche, aunque sus servicios tienen un horario y se encargan de regular la temperatura del agua.
Hay un tren turístico que las recorre todas, pero nosotros en esta ocasión hemos preferido hacerlo a pie. Las siguientes que nos encontramos a unos 400 metros, son las de O Tinteiro.
Estas no son pozas en sí, simplemente unas fuentes con aguas de manantial a las que se le han atribuido propiedades curativas como las de cicatrización de heridas, afecciones bucales, eczemas y ulceras. El agua sale aquí sobre los 43ºC.Seguimos camino y pronto nos encontramos con las Pozas de Muiño da Veiga
Se encuentran en la zona de Quintela de Canedo, son de uso gratuito estas fueron las últimas en rehabilitarse y su nombre se debe a la presencia de un viejo molino que también fue rehabilitado. Cuentan con una gran poza principal de 200 metros cuadrados y otras tres más de menor tamaño y amplia zona ajardinada.
Lo siguiente que veremos es la zona de pago de las Termas de Outariz.
A precios económicos y muy bien cuidadas ofrecen también servicio de restaurante.
Unos metros más adelante están las Pozas de uso público gratuitas y prácticamente juntas con las Burgas de Canedo. Las dos cuentan con una poza de agua fría y 3 de agua caliente, además de duchas, fuentes, bancos, aseos, bar y amplia zona ajardinada.
A éstas se puede acceder también desde el otro lado del río por la carretera OU-402 donde hay un amplio aparcamiento y una pasarela peatonal.
Y aunque el camino continua hasta Arrabaldo, hemos preferido dar la vuelta porque las fuerzas y el tiempo no daban para más. Otro día será!
A unos 10 kilómetros más adelante están las Termas de Barbantes ó Cenlle de características similares en cuanto a servicios y área de recreo, pero esas ya quedarán para otro momento.
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