En la parte alta del pueblo y en lo alto de una colina, vemos este conjunto formado por lo que queda del castillo y de la iglesia parroquial de El Salvador.
En este municipio se han encontrado restos históricos de las edades de Bronce y del Hierro, así como vestigios romanos.
A lo largo del tiempo su nombre ha sufrido diferentes variaciones llamándose en un primer momento "Santibáñez de la Mota", luego "Valdelamota", en el s. XV "La Mota de Toro", y posteriormente paso a denominarse como es conocido hoy en día "Mota del Marqués" al pertenecer al marqués D. Rodrigo de Ulloa. En el siglo XVIII, el municipio fue agregado a la provincia de Valladolid y el marquesado recayó en la casa de Alba.
Y, de donde proviene la palabra "mota"? pues se denomina así al pequeño montículo que hay junto al pueblo, o sea montículo ó mota.
Y es justo ahí donde se encuentran los restos del castillo del siglo X del que sólo se conserva parte de lo que fue su Torre del Homenaje. Una pequeña senda que parte del centro del pueblo nos lleva hasta allí y podemos disfrutar de las vistas a las montañas de la Sierra de Gredos.
En el camino podemos ver también los restos de la iglesia parroquial del siglo XVI dedicada a El Salvador de la que solo queda en pie su espadaña.
Además cabe destacar en el pueblo la Iglesia de San Martín del siglo XVI de estilo gótico-renacentista y obra del arquitecto Rodrigo Gil de Hontañón reformada en el s. XVIII.
Las ermitas del Cristo del Humilladero (barroca del siglo XVII) y la de Nuestra Señora de Castellanos del siglo XVI de estilo gótico-mudéjar.
Otro edificio que merece la pena visitar es el Palacio de los Marqueses de Ulloa del siglo XVI, con unos hermosos jardines cuidados por las monjas de la Compañía del Salvador.
Ahh, no iros del pueblo sin probar sus famosas pastas artesanas
Cómo llegar:
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