Monasterio Cisterciense de La Santa Espina (Valladolid)


En la provincia de Valladolid en los Montes Torozos y cerca del bonito pueblo de Urueña  se encuetra el Monasterio de La Santa Espina fundado en el s. XII, concrétamente en el año 1147 de la mano de la infanta doña Sancha de Castilla, hermana de Alfonso VII el Emperador, llegando los primeros monjes cistercienses.
El nombre tan curioso de este lugar se debe a que aquí se custodia una espina de la corona de Jesús, regalada a este Monasterio por la infanta.
Acompañados por un amable guía de avanzada edad, nos disponemos a recorrer sus estancias, explicándonos todo con sumo cuidado.

Llama la atención los diferentes artes arquitectónicos que vemos a nuestro paso y es que se construyó en varias épocas a lo que hay que sumarle las reformas posteriores hasta convertirse en la Escuela de Capataces Agrarios que es hoy en día.

Rodeado de unos hermosos y cuidados jardines, accedemos a través de un arco de triunfo del s. XVI y cerca vemos un monolito que recuerda el encuentro de Felipe II con D. Juan de Austria en 1559.




Del siglo XVI es también la fachada de la hospedería, en la que resaltan los escudos del Abad y de Alfonso VII y la fachada de la iglesia y sus dos torres son de mediados del s. XVII.




En el interior destacan sus dos claustros, el de la hospedería del siglo XVI, y el Claustro Procesional que fue transformado del primitivo cirterciense en el s. XVII y en el cual podemos observar abundantes marcas de cantero.


Pasamos ahora a la sala capitular que destaca por su decoración sencilla ya que es una parte mucho más antigua, del s. XII, al igual que la sacristía y la biblioteca claustral.


En 1275 comenzaron las obras de la iglesia, de planta de cruz latina y tres naves decoradas con arcos de medio punto, donde se mezclan los estilos gótico y renacentista. Aquí se encuentran los sepulcros de las familias Meneses y Alburquerque.
Capillas :
- Capilla de la Reliquia del s. XVII, diseñada por Francisco de Praves, en la que se puede contemplar la custodia que guarda una de las Espinas de la corona que Jesucristo llevaba el día de su muerte.
- Capilla de los Vegas, del s. XIV, panteón de esta familia noble de Castilla
- Capilla de San Rafael, que era la antigua capilla del abad y en la que están enterrados D. Rafael Cavestany y de Anduaga, promotor de la última restauración del Monasterio, y su esposa.


El Monasterio ha sobrevivido a un incendio que en el año 1731 destruyó la biblioteca y gran parte del edificio.
Fue abandonado abandonaron definitivamente por los monjes en el año 1835 tras la invasión francesa y la desamortización de Mendizábal.


En 1865 adquirió el monasterio el diputado y posteriormente Ministro de Hacienda, Manuel Cantero quien lo cedió al abogado Ángel Juan Álvarez, secretario particular de Isabel II y Marqués de Valderas. Fue su viuda Susana de Montes y Bayón, quien  en 1886 crea la fundación para convertir el antiguo monasterio en un Asilo con escuelas para huérfanos, llamada “Escuelas primarias de Agricultura con Asilo”,  dirigida por los Hermanos de las Escuelas Cristianas de Lasalle.
Declarado Bien de Interés Cultural  BIC en el año 1931.

En 1955 el ministro de Agricultura Rafael Cavestany, creador del Servicio de Concentración Parcelaria promovió la creación de un pueblo a través del Instituto Nacional de Colonización en una finca comprada a los herederos de doña Susana de Montes. Sería el pueblo de La Santa Espina inaugurado por Francisco Franco en 1959, formado por colonos de pueblos próximos a Castromonde.
Todos aquellos que reunían las condiciones estipuladas por el Instituto Nacional de Colonización solicitaron a este organismo la ocupación de las viviendas con un lote de aproximadamente 25 hectáreas de terreno con huerto no pudiendo ser propietarios de las mismas hasta pasados 20 años.


En 1954 se firmó un convenio entre el Ministerio de Agricultura y el patronato de la Fundación por el que se establecieron en el Monasterio las enseñanzas de Capataces en sus diferentes modalidades agrarias regladas de acuerdo con lo dispuesto por el Ministerio de Agricultura.

En 1976 se amplió el Convenio para acoger los cursos de Formación Profesional Agraria cuyas enseñanzas de Primer Grado quedaron encomendadas a los Hermanos de las Escuelas Cristianas, siendo transferidas las competencias a la Comunidad Autónoma de Castilla y León en 1985.


En la actualidad se imparten en el Centro de Formación Profesional San Rafael las enseñanzas de Formación Profesional Agraria de 1º y 2º Grado; Capataces Agrícolas (Jefes de Explotación); curso de formación y reciclaje de jóvenes campesinos y miembros de otras familias agrarias.


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